El Estado sionista de Israel ha anunciado la aprobación de 22 nuevos asentamientos en la Cisjordania ocupada, profundizando así su política de colonización y despojo en territorio palestino. La decisión, revelada el 29 de mayo, ha sido condenada por el Gobierno de Brasil, que denunció la medida como una violación flagrante del derecho internacional y un paso más hacia la anexión total del territorio palestino.

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La comunidad internacional ya ha sido advertida por instancias jurídicas globales. El dictamen consultivo de la Corte Internacional de Justicia del 19 de julio de 2024 calificó como ilegal la permanencia de Israel en los territorios ocupados y exigió el cese inmediato de cualquier actividad de asentamiento, así como la evacuación total de colonos israelíes.

No obstante, el régimen israelí continúa avanzando en su estrategia de hechos consumados, con acciones unilaterales que buscan transformar realidades sobre el terreno e impedir una salida política al conflicto. Estas acciones, que equivalen a una anexión encubierta, demuestran el absoluto desprecio del sionismo gobernante por el derecho internacional y por los derechos del pueblo palestino.

Brasil reafirmó su compromiso con un Estado de Palestina libre, soberano y viable, con fronteras reconocidas según los límites de 1967, que incluyan Cisjordania, la Franja de Gaza y Jerusalén Oriental como capital. Frente a la ofensiva colonial israelí, la solidaridad internacional con la causa palestina es hoy más urgente que nunca.

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