La delegación tenía previsto reunirse con el presidente palestino, Mahmud Abás, en Ramalá, para expresar apoyo diplomático en medio de la brutal agresión en la Franja de Gaza.

El ministro de Relaciones Exteriores de Arabia Saudita, Faisal bin Farhan, declaró este domingo en una conferencia de prensa conjunta en Amán que «la negativa de Israel a permitir que el comité ministerial visite Cisjordania confirma su extremismo y su rechazo a cualquier intento serio de paz y diplomacia. Parece que no quieren nada, excepto la violencia».

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En la misma línea, el ministro de Asuntos Exteriores y Expatriados de Jordania, Ayman Safadi, afirmó que la decisión israelí «confirma al mundo su desprecio por los esfuerzos de paz y refleja su arrogancia y extremismo». Safadi fue enfático al señalar que «el gabinete extremista israelí que comete masacres en Gaza, asesina a niños y mujeres, destruye hospitales y utiliza la hambruna como arma, es el mismo gabinete extremista que también prohíbe las visitas a Cisjordania».

Ante las acciones de Israel, Safadi, llamó al mundo a «reconocer la realidad de este gabinete israelí extremista» y actuar en consecuencia. El funcionario reiteró además, el compromiso árabe de detener la guerra contra el pueblo palestino y, sobre todo, de establecer un Estado palestino independiente como la única solución justa al genocidio israelí.

La delegación ministerial, compuesta por representantes de Jordania, Egipto, Arabia Saudí, Catar y los Emiratos Árabes Unidos, buscaba promover el establecimiento de un Estado palestino. Esta iniciativa se enmarca en los planes de Arabia Saudita y Francia de celebrar una conferencia en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) el próximo mes para lograr un mayor consenso sobre el reconocimiento de Palestina como un Estado independiente. Actualmente, unos 145 países ya han dado este paso, incluyendo muchos de Europa del Este.

Las últimas medidas de Israel, según el canciller saudí, Al-Saud, «no harán más que reforzar la determinación de intensificar los esfuerzos diplomáticos en la comunidad internacional para enfrentar la arrogancia israelí». Estas acciones, añadió, demuestran la necesidad urgente de que Occidente reconozca al Estado palestino, condición «imprescindible para una paz justa» en la región.

El veto israelí ocurre en medio de profundas preocupaciones por la política del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, de profundizar la ocupación y anexión de facto de Cisjordania y, más recientemente, de Gaza.

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